
El atletismo español ha regresado a la Universiada tras 12 años sin participación. Este año, del 21 al 27 de julio, se celebraba en la ciudad de Bochum (Alemania), y #EspañaAtletismo volvió con un total de 9 medallas: 2 oros, 3 platas y 4 bronces, lo que significa un nuevo hito histórico para la delegación, siendo el mejor resultado de siempre en esta competición.
Hasta ahora, el mejor balance databa de Palma de Mallorca 1999, con 6 medallas (1 oro, 1 plata y 4 bronces). Superar ampliamente esa cifra tras más de una década sin competir en los World University Games confirma el gran estado de forma del atletismo español.
Los dos oros llegaron en los últimos días del evento. En los 800 m, David Barroso firmó una carrera impecable para alzarse con el título, con un registro de 1:47.64. En el salto de altura, Una Stancev volvió a superar la barrera del 1.90 m para proclamarse campeona con una altura de 1.91 m, demostrando su gran estado de forma.
Las platas fueron para Adrià Alfonso, que voló en los 200 m, donde fue segundo con un tiempo de 20.70. En los 110 m vallas, Ángel Díaz también se colgó la plata con 13.59, mientras que en los 3000 m obstáculos, Alejandro Quijada se metió de lleno en la pelea alzándose hasta la segunda posición con una marca de 8:20.70.
En cuanto a los bronces, cuatro atletas subieron al tercer escalón del podio. En la prueba femenina de los 200 m, Esperança Cladera logró un tiempo de 23.03 que le aupó hasta las posiciones de honor; en los 800 m, Daniela García registró un 2:00.12, muy cerca de su marca personal (2:00.05). En los 10000 m, doblete con Mario Priego, que se hizo con el bronce con un tiempo de 28:45.02, mientras que Alicia Berzosa, en la misma distancia, firmó un sensacional 32:00.73 (MP).
Con esta actuación, #EspañaAtletismo no solo firma un nuevo récord de medallas en una Universiada, sino que marca un regreso a lo grande a una competición donde habíamos estado ausente en las cuatro ediciones anteriores a la de este año y que se ha vuelto con la mejor actuación histórica.